Michael Andretti, despues de ganar en Toronto en 2001. Le acompaña su hijo Marco (izquierda) ahora piloto en la IRL (c) Foto de Champcar World Series, LLC
La CART está en un proceso de agonía que parece, ya nadie puede parar. Lo trágico del asunto es que también la IRL está pasando las de Caín. De nada le sirvió a la serie de Tony George piratearse a nombres como Andretti, de Ferran, Castro-Neves, Franchitti, etc. Ambos seriales parecen condenados al fracaso.
Parece un hecho que no pueden con la popularidad de NASCAR, por más que los puristas digamos que NASCAR es un circo y no un serial de automovilismo.
Sin embargo, la solución que hace algunos años parecía viable, hoy parece más distante que nunca. Hoy por hoy, hablar de unir los seriales parece totalmente inviable. La evolución que ambos han tenido juega en contra. La adopción de un chasis y motor único en CART, o su tendencia a mantener más carreras fuera de Estados Unidos parece seguir el camino totalmente opuesto al de IRL donde se han incorporado fabricantes. Creo que es cuestion de tiempo para que Reynard o Lola decidan incursionar en el serial de óvalos.
Sin embargo el problema es común a los dos. Tribunas a medio llenar y bajos ratings. ¿Qué sucede? Estos son a mi juicio algunos factores que están jugando en contra:
1) Pocos incentivos para desarrollo. En CART al hacerlo de características monomarca, no hay ninguna motivación para buscar hacer rendir más motores o chasises, ya que todo esto está prohibido. IRL a pesar de permitir variaciones, la reglamentación es tan inflexible que prácticamente no deja nada para innovar.
2) Carencia completa de figuras. Durante algún tiempo, llegaron a CART demasiados pilotos de medio pelo. Los pesos pesados se fueron a IRL junto con los equipos (Penske, Green y Ganassi entre ellos). No hay ningún piloto norteamericano de categoría (la IRL, si bien tiene a Marco Andretti, éste aún está muy verde).
3) CART se olvido de los óvalos, e IRL se enfocó exclusivamente a óvalos. Recuerdo uno de los mejores años en CART, el 97 fue cuando hubo un buen balance entre una clase de circuitos y la otra (10 circuitos y 7 óvalos).
Dicen que las comparaciones son odiosas, pero ahi va... Fórmula 1 mantiene records de audiencia. A pesar del retiro de Schumacher, sigue manteniendo el interés y todos los pilotos monoplaza del mundo aspiran a llegar a esta categoría, y sin tener que recurrir a soluciones "artificiales" (como hizo CART con el famoso botón "push-to-pas").
¿Será entonces que el automovilismo "open-wheel" en Estados Unidos está condenado a muerte?