Que chistoso! Ayer la selección empató 2-2 con Estados Unidos. Dos veces, se adelantaron los gringos y dos veces, gracias a ¡un defensa central! México empató. México llegó más, pero Estados Unidos fue más certero. Nada distinto a lo que ya nos tiene acostumbrado el mediocre futbol mexicano.
Pero lo chistoso es esto... Casi todos los periodistas (sic) deportivos fueron comprensivos y benevolentes en exceso con Hugo Sánchez.
Edgar Valero de Crónica: En su artículo "Ganar era una objetivo, no una obligación" (http://www.cronica.com.mx/nota.php?id_nota=346399) dice: "Que Memo Ochoa siga sin aprender a desplazarse en las trayectorias largas en tiros de media distancia, tampoco es culpa de Hugo Sánchez.Que la línea defensiva cometa errores de marcación que ni los niños de primaria cometerían, tampoco es culpa de Hugo Sánchez." "hubiera querido que ganara México, sí, como seguro que Hugo Sánchez también lo quería, pero el empate no es malo".
Apuesto doble contra sencillo a que si el nombre del entrenador hubiera sido Ricardo Lavolpe, hasta el título hubiera sido distinto. Lo mismo aplica para otros, como el tontito llamado Pablo Carrillo.
Neta que no entiendo. Debo reconocer que el único que mantiene una congruencia -con todo lo gordo que me cae- es José Ramón Fernandez. El resto de los "periodistas" alegremente cantan las loas a Hugo Sánchez.
Chistoso ¿no? O SOSPECHOSO
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